Antecedentes

Antecedentes de la Psicología Clínica



A lo largo de la historia se ha tratado de explicar el
comportamiento anormal por medio de diferentes teorías.

Al principio fue por  la demonología, donde se decía que un demonio se apoderaba de la mente y que estas conductas anormales eran producto de la ira divina.  Esto comenzó en países occidentales,  desde el 8000 a.C., y es en el siglo XVIII cuando se comienza a practicar el exorcismo.

                                         

Otra teoría  fue la de somatogénesis conocida gracias a Hipócrates, quien separó la religión de la medicina y terminó con la creencia de que los dioses que mandaban enfermedades.

Hipócrates pensaba que el cerebro era el órgano de la conciencia, y si había desviaciones en el comportamiento o  pensamiento, entonces había una patología cerebral.

Posteriormente, Galeno pensó que las enfermedades del alma estaban regidas por pasiones (envidia, lujuria, bajas pasiones y el pensamiento) afirmó que estas estaban gobernadas por un poder irracional dentro de nosotros. 

Para la Edad Media los enfermos mentales eran vistos como brujos y hechiceros,  en el siglo XIII se hablaba de demonios, la negación de Dios y  sobretodo de herejías. 

En 1484 se decía que las mujeres se volvían brujas por los deseos carnales insaciables, entonces interrogaban a las mujeres y las acusadas eran quemadas o encarceladas.

 Fue en 1610, en España, que Alonso Salazar y Farias afirmó que muchas de las acusaciones eran erróneas, y pidió evidencias. Algunas mujeres acusadas de brujas, afirmaban haber copulado con el demonio, por lo que se considera que estas mujeres eran psicóticas.

En el siglo XIII las autoridades se comienzan a ser responsables del cuidado de los enfermos, un hospital importante en esa época es el de Santa Trinidad.

Para entonces, los  enfermos mentales fueron vistos como un  espectáculo y se cobraba el derecho de verlos.  Se construyó el primer psiquiátrico en Williambsburgo, pero ahí se trataba a las personas como fieras, eran encadenadas y tratadas de una manera totalmente deshumana.

Durante la revolución francesa, Pinel, logró que los enfermos mentales fueran tratados  como personas enfermas y no como animales, sin embargo, él  daba preferencia a las personas que pertenecían a la clase alta.

Para 1796, Tuke,  proporcionaba a los enfermos mentales una vida tranquila donde podían trabajar y descansar; varios hospitales retomaron este ejemplo, sin embargo este tipo de tratamientos tuvo fin por las condiciones que brindaban a los pacientes, ya que se descubrió que se les daba alcohol.

Sydenham

A partir de la edad media, los descubrimientos de Vesalio cambiaron totalmente la forma de conocer al humano y Sydenham  propuso un enfoque empírico para la clasificación de las enfermedades mentales.

Por otro lado, Griesinger  sostenía  que los trastornos mentales eran causados por problemas fisiologicos y  Kraepelin publicó textos sobre psiquiatría donde elaboraba una clasificación que determinaba la naturaleza orgánica de la enfermedad mental (psicosis, esquizofrenia, etc).

En Austria, Mesmer  abordo la histeria, sostenía que ésta era  provocada por mala distribución de líquido magnético en el cuerpo, y para curarse debía tener una distribución normal.

Uno de sus precursores  fue Charcot, quien hizo uso de la hipnosis al igual que Mesmer, trabajó algunos síntomas de la histeria, sin embargo no tuvo éxito como Breuer, quien a través de la catarsis lograba curar a la gente, ya que consideraba importante  expresar las emociones, ideas o pensamientos, Breuer publicó una obra  considerada una clave para el entendimiento y tratamiento de la conducta anormal.